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Sep23

EBEN-ÉZER

Mes // Septiembre 2024

DEJANDO UN LEGADO PARA MI FAMILIA

EBEN-ÉZER
«Entonces Samuel tomó una piedra, la puso entre los pueblos de Mizpa y Sen, y la llamó Eben-ézer, pues declaró: «Hasta aquí nos ha ayudado Dios.»
► 1 Samuel 7:12

Esta inscripción hecha en piedra por el profeta y sacerdote Samuel fue, en su momento, una evidencia para el pueblo de que Dios «Hasta aquí nos ha ayudado» . Y no está desactualizada para nuestros días. Es una demostración que nos lleva a advertir que la mano de Dios siempre está con Sus hijos.

- En el Antiguo Testamento, hay porciones que claramente nos lo dejan ver:
- Libró a David de las garras del oso y del león,
- Perdonó el pecado de Manasés,
- Guardó el pacto con Abraham,
- Escuchó la oración de Ezequías,
- Sacó a Israel de la esclavitud, pasándolos por el mar Rojo en seco para llegar a la tierra prometida.

De la misma manera, mantiene Su fidelidad y veracidad hasta el día de hoy, sobre nuestras vidas. Los grandes prodigios de Dios no son de otros tiempos; son también para nosotros, quienes estamos aquí en la tierra.

Revisar nuestros diarios, mirar por el retrovisor de nuestras vidas y encontrar cuándo Él ha estado a nuestro favor y descubrir felices incidentes reanimantes para nuestra vida, que le glorifiquen, es un sabio ejercicio. Reconozcamos favores de sanidad, bendición, liberación, perdón, provisión y, sobre todo, de esperanza en nuestras necesidades. Podemos y debemos mencionarlos permanentemente para que nuestro corazón no se ensoberbezca, no se endurezca, no se enorgullezca… No lo ganamos por nosotros mismos; lo recibimos de parte de un Dios bueno y generoso, que “ha sido nuestro Eben-ézer”.

Por lo tanto, fija tus pensamientos en Dios y en conexión contigo mismo. Es un ejercicio muy deleitable recordar las maneras en que los agradecidos dejaron constancia de sus reconocimientos:

- Noé hizo un altar después de ser salvado del diluvio,
- Abraham levantó un altar y lo llamó Jehová Jiré, porque en el monte fue provisto,
- Jacob tomó la piedra que tenía por cabecera, derramó aceite sobre ella y, al invocar el nombre del Señor, llamó aquel lugar Betel,
- El pandero de María y el cántico de Moisés al pasar el mar Rojo,
- Las 12 piedras levantadas por Josué en el Jordán para que el río se secara y pudieran pasar a pie, como testimonio a las siguientes generaciones, cuando preguntaran: «¿Qué significan estas piedras?» (Josué 4:6-8).

Nos hemos regocijado en esta piedra que Samuel tomó y llamó Eben-ézer, ya que una generación muestra a otra todas Sus maravillosas obras. Sería muy benéfico registrar las buenas obras del Señor tal como las hemos visto.

Punto de acción

Rememora a Samuel organizando las piedras y diciendo: “Hasta aquí nos ha ayudado mi Dios”. Cambia el “nos” por “mi” y di:“Hasta aquí me ha ayudado mi Dios”.

Lectura bíblica necesaria: 1 Samuel 1(RVR60)

Autor

María Piedad Mesa

María Piedad Mesa

Escritora de:
Busca Amar a Dios y Ser Ejemplo
Bendito el Fruto de tu Vientre

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