Alabarte

¿Te has dado cuenta que alabas a Dios cuando todo te sale bien, pero te quejas cuando todo va mal?

Esa es nuestra tendencia: Depender más de las circunstancias externas que de una actitud interna. Esa es la razón por la cual la Biblia habla del "sacrificio de alabanza".

« Por eso debemos alabar siempre a Dios por medio de Jesucristo. Esta alabanza es el sacrificio que debemos ofrecer. ¡Alabémoslo, pues, con nuestros labios! 16 No se olviden ustedes de hacer el bien y de compartir con otros lo que tienen; porque éstos son los sacrificios que agradan a Dios. » - Hebreos 13:15‭-‬16 (DHH)

¿Por qué Dios se agrada de tu alabanza?

1) La alabanza a Dios te ayuda a confesar su nombre, es decir a centrarte en el carácter de Dios y en su poder, y no en ti, o en tus circunstancias: Esto te amplía la perspectiva de tu vida, y con la ayuda de Dios tu fe se renueva, encontrando nuevas fuerzas para proseguir a la meta (Hebreos 11:33-34).

2) La alabanza a Dios te capacita para hacer el bien y ayudar a otros, porque te enfoca en lo que realmente permanece a través del tiempo (Hebreos 11:1-2).

Punto acción:

Hoy puedes decidir si alabas a Dios, o te quejas. Los resultados de la alabanza marcan la diferencia. ¡Hazlo!