Skip to main content
Mar19

¿Soy idólatra?

Mes // Marzo

¿Soy idólatra?
«A todos los sedientos, venid a las aguas; y los que no tenéis dinero, venid, comprad y comed. Venid, comprad vino y leche sin dinero y sin costo alguno.»
¿Por qué gastáis dinero en lo que no es pan, y vuestro salario en lo que no sacia?
Escuchadme atentamente, y comed lo que es bueno, y se deleitará vuestra alma en la abundancia. Inclinad vuestro oído y venid a mí, escuchad y vivirá vuestra alma.»

► Isaías 55: 1-3‭ (RVR-60)
Para responder acertadamente la pregunta del título, comencemos definiendo bíblicamente la palabra Idolatría, pues a veces pensamos que no somos idólatras porque no nos arrodillamos ante un estatua de yeso.

Para eso nos debemos remontar en los tiempos al comienzo de la humanidad. Es un hecho que Dios creó al hombre con un vacío en forma de Dios para que encontráramos deleite en Él.

Pero el hombre quedó con una insatisfacción, con hambre y sed, desde su caída en el Edén, pues fue separado de Dios. Desde entonces ha buscado desesperadamente en otras cosas algo que lo satisfaga y llene el vacío de su vida; y en esa búsqueda ha invertido mucho.

Por lo que la idolatría es: buscar satisfacción en algún otro lugar fuera de Dios.

Cualquier cosa que pongamos como fuente de deleite, de vida y de provisión en el lugar que le pertenece a Dios, es un ídolo.

Según Isaías 2:8-9, ponemos cualquier persona o cosa, en el lugar de Dios, cuando ante el cual:
- Nos arrodillemos
- Nos inclinemos
- Nos humillemos
(no es tanto lo externo, sino especialmente el interior)

Punto de acción

Estimados, sea lo que sea a lo que nos aferremos para encontrar satisfacción es una mentira… a menos que sea Cristo. Si en este momento te estás aferrando a una mentira buscando satisfacción, debes reconocerlo como idolatría, y a ti como idólatra. Tenga en cuenta que la idolatría se lleva en el corazón.

Confiese al Señor dicha idolatría diciéndole que estaba engañado, pero que de ahora en adelante saca esa idolatría de su vida lanzándola hacia Él para que la destruya; y declare que Dios será la única fuente de satisfacción. El Señor le exhorta a que se aparte de los ídolos que hay en su corazón.

«¡Arrepiéntanse! Apártense de una vez por todas de su idolatría y de toda práctica repugnante.» Ez. 14:6



Lectura bíblica necesaria: Isaías 55 (RVR60)