Abr12
Un cordero
Mes // Abril
► Juan 1:29(NVI)
La Biblia registra que Juan el bautista representaba para los judíos un enigma. Nadie lo conocía bien, pues, literalmente, vivía en un desierto, se vestía con pelo de camello, comía saltamontes y miel silvestre, sin embargo, fue él quien hizo una de las afirmaciones más reveladoras del ministerio de Jesús:«El Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo». El hecho de que Juan el Bautista comparara el ministerio de Jesús con un cordero que va al matadero, nos ofrece una maravillosa perspectiva de la identidad de Jesús y su obra a favor nuestro.
En el plan de Dios, Jesús murió la muerte de la humanidad, una vez y por todos. La alusión hecha por Juan a un cordero que quitaba el pecado del mundo, captó la atención de los judíos y a la vez les recordó al cordero pascual, cuyo sacrificio evitó que el ángel de la muerte visitara a las familias israelitas cuando mató a todos los primogénitos de Egipto.
¡Cuán importante es para cada persona tener claridad sobre su verdadera identidad en Cristo! La verdad es que muchos de nuestros fracasos personales surgen de la distorsión que arrastramos sobre este asunto.
Nuestra identidad en Jesucristo define quiénes somos y le da sentido a nuestra vida; a pesar de que vivamos alguna crisis doméstica o financiera, etc, es la Cruz quien nos marca el camino de libertad.
Punto de acción
Te animamos, por tanto, a recordar y a celebrar el hecho maravilloso de que tu fe no esté fundada en la sabiduría de los hombres, ni esfuerzo humano, sino en el poder de Dios. Lee Romanos 4.
Lectura bíblica necesaria:
Romanos 4:16-25 (NVI)
En el plan de Dios, Jesús murió la muerte de la humanidad, una vez y por todos. La alusión hecha por Juan a un cordero que quitaba el pecado del mundo, captó la atención de los judíos y a la vez les recordó al cordero pascual, cuyo sacrificio evitó que el ángel de la muerte visitara a las familias israelitas cuando mató a todos los primogénitos de Egipto.
¡Cuán importante es para cada persona tener claridad sobre su verdadera identidad en Cristo! La verdad es que muchos de nuestros fracasos personales surgen de la distorsión que arrastramos sobre este asunto.
Nuestra identidad en Jesucristo define quiénes somos y le da sentido a nuestra vida; a pesar de que vivamos alguna crisis doméstica o financiera, etc, es la Cruz quien nos marca el camino de libertad.
Punto de acción
Te animamos, por tanto, a recordar y a celebrar el hecho maravilloso de que tu fe no esté fundada en la sabiduría de los hombres, ni esfuerzo humano, sino en el poder de Dios. Lee Romanos 4.