[widgetkit id="2"]
Mar04
Valiosa visita
Mes // Marzo
► Hechos 9:34 (PDT)
Pedro, de buscar peces ahora busca amigos…
Para este momento de la historia de Pedro (Hechos 9), su enérgico y osado carácter lo usa en nuevos lugares para buscar otro tipo de seres con otro tipo de agallas, muy diferentes a las de su antiguo oficio.
Y es allí donde, visitando una ciudad cercana Lida, encuentra a un viejo y conocido amigo, Eneas; lo que no sabía es que este « llevaba 8 años paralitico y postrado en cama », muy seguramente sin esperanza y sin ilusión.
Al verlo Pedro hace un pequeño pero poderoso saludo que cambiaría todo el futuro de Eneas:
« Jesucristo te sana. Levántate y arregla tu cama »
Hoy recibes esta reflexión de un amigo que te dice y desea lo mejor para ti: “Jesús te sana; Animo, continua.”
Seguramente al igual que Pedro, no conoces por qué estas “paralizado”, que es lo que te impide avanzar en tu fe, puedes ser:
Dios desea que vuelvas a encender el motor que mueve tu vida, la fe; que seas de esos que tienen las agallas de creer en Jesucristo por encima de todo, levantarse y seguir. Romper con cualquier tipo de parálisis o atadura.
« Porque todo el que ha nacido de Dios vence al mundo. Esta es la victoria que vence al mundo: nuestra fe. »
1 Juan 5:4 (NVI)
Lectura bíblica necesaria: Hechos 9:32-35(DHH) Para este momento de la historia de Pedro (Hechos 9), su enérgico y osado carácter lo usa en nuevos lugares para buscar otro tipo de seres con otro tipo de agallas, muy diferentes a las de su antiguo oficio.
Y es allí donde, visitando una ciudad cercana Lida, encuentra a un viejo y conocido amigo, Eneas; lo que no sabía es que este « llevaba 8 años paralitico y postrado en cama », muy seguramente sin esperanza y sin ilusión.
Al verlo Pedro hace un pequeño pero poderoso saludo que cambiaría todo el futuro de Eneas:
« Jesucristo te sana. Levántate y arregla tu cama »
Hoy recibes esta reflexión de un amigo que te dice y desea lo mejor para ti: “Jesús te sana; Animo, continua.”
Seguramente al igual que Pedro, no conoces por qué estas “paralizado”, que es lo que te impide avanzar en tu fe, puedes ser:
- • Tus emociones (Eres seco, inexpresivo, no abrazas, no amas)
- • Tu proyecto de vida (Sin propósito, no sueñas, no anhelas, sin esperanza),
- • Tu ambiente familiar (Sin unidad, sin respeto)
- • Tus finanzas (Deudas o esclavitud financiera)
Dios desea que vuelvas a encender el motor que mueve tu vida, la fe; que seas de esos que tienen las agallas de creer en Jesucristo por encima de todo, levantarse y seguir. Romper con cualquier tipo de parálisis o atadura.
1 Juan 5:4 (NVI)