Sep05
Adora solo a Dios
Mes // Septiembre 2024

Estamos viviendo en una generación donde el corazón del hombre se hace “dioses” de todo lo que ve y le agrada, quizá por la necesidad natural que tiene el ser humano de adorar a un ser superior. Pero el problema está en que, al no reconocer al Dios vivo y verdadero, se postra ante otros que no son Él.
La vida espiritual personal permea todas las áreas de la vida del creyente, y es necesario que todo creyente sepa que Dios, y solamente Dios, merece ser adorado y alabado.
En el libro de Éxodo 20:4-6 se nos dice: «No tendrás dioses ajenos delante de mí» . Por eso, debemos conocer qué elementos pueden llevarnos a postrarnos, por ejemplo:
1. Objetos que son considerados sobrenaturales y adorados directamente o por medio de imágenes como si fueran dios.
2. Cosas o personas que absorben completamente nuestro interés, llenan nuestro pensamiento y llegan a ser nuestra razón de vida. Distraídos por estas cosas, no hay espacio para Dios. La intención por la cual fuimos creados es obstruida. Dios es excluido de nuestras vidas. Cuando amores indebidos compiten con Dios, el deseo de Dios de tener una íntima relación con nosotros, y así poder disfrutar de todo lo que Él tiene para nosotros, es arruinado. Nosotros salimos perdiendo.
3. Espíritus satánicos u objetos que directa o indirectamente servimos, adoramos y obedecemos. Podríamos pensar que quien ya conoce a Cristo estaría exento de esta situación, pero resulta que no. La ola de la postmodernidad y la nueva era ha engañado a la juventud y también a los adultos, creyendo que las modas que vienen de Oriente (decoración, música, rituales y muchas otras expresiones como olores, formas y colores) son aceptables, cuando Jehová las abomina, como dice en Isaías 2:6:
«Ciertamente tú has dejado tu pueblo, la casa de Jacob, porque están llenos de costumbres traídas del oriente, y de agoreros, como los filisteos; y pactan con hijos de extranjeros.»
No podemos adoptarlas como nuevas posibilidades de felicidad, tranquilidad o seguridad. ¡Qué tarde es cuando nos damos cuenta de que dicha cultura oriental viene de raíces politeístas, de adoración a seres vivientes como animales y otras expresiones, y se adoptan sin consideración de la verdad y la obediencia irrestricta a la Palabra de Dios!
«Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a Él sólo servirás» . Mateo 4:10
Punto de acción
Es una decisión que debes tomar ahora:
¡QUE NADA NI NADIE SEA TU DIOS AJENO QUE ESTORBE SU RELACIÓN DE AMOR CONTIGO!
Autor: María Piedad Mesa
