Skip to main content

22 Abril 2021

Mi Refugio

Mi Refugio
«Tú eres mi refugio; me guardarás de la angustia; Con cánticos de liberación me rodearás.»
► Salmos 32:7 (RVR60)

Refugio: (Re: “otra vez”, fugio: “huir”) etimológicamente podemos definir que no solo es protección, sino también la forma de salir de un problema o peligro.

Conocemos o sabemos de diferentes tipos de refugios, desde una pequeña carpa o tienda de campaña, hasta un gigantesco espacio de concreto bajo tierra, cuya esperanza, en ambos casos, es generar protección y un sentimiento de salvación o seguridad en las circunstancias desfavorables.

El salmista en una veintena de veces nos presenta a Jehová, la roca fuerte, como el sitio seguro que nos protegerá; lo interesante del asunto es que no siempre el peligro se debía a un asunto externo, sino en ocasiones a uno interno, él mismo, sus pecados y el juicio que acarrearían.

Tal como lo vemos en el salmo 32, David reconoce que su estado de angustia es ocasionado por su rebeldía y lejanía de Dios, «Mientras callé, se envejecieron mis huesos en mi gemir todo el día.» (V3) Pero, que tan pronto el confesó y no encubrió su maldad, allí comprendió la protección de Dios ante un juicio futuro. «Por lo tanto, que todos los justos oren a ti, mientras aún haya tiempo, para que no se ahoguen en las desbordantes aguas del juicio.» (V.6 NTV)

Ahora bien, David también tuvo que enfrentar batallas externas contra enemigos como los filisteos, que parecían como un virus por todo el territorio, los enfrentó con fe, venciendo al hombre fuerte, Goliad (temor) y así haciendo huir al resto. David conoció al Señor como el refugio seguro, el castillo y su fortaleza.

«Jehová, roca mía y castillo mío, y mi libertador; Dios mío, fortaleza mía, en él confiaré; Mi escudo, y la fuerza de mi salvación, mi alto refugio.»
Salmos 18:2


Punto de acción:

Sin duda, la connotación más válida de refugio en estos tiempos peligrosos y de angustia causados por la pandemia es el de obtener protección personal y familiar, o quizás la necesidad de una respuesta a nuestra oración por aquellos que están en un hospital; para quienes el Señor y su palabra es su refugio entonces estarán seguros. Pero no olvides protegerte de ti mismo, nuestra maldad podría ser más letal que el mismo virus.

«No hay santo como Jehová; Porque no hay ninguno fuera de ti, Y no hay refugio como el Dios nuestro. » 1 Samuel 2:2


Lectura bíblica necesaria: Salmos 32(RVR60)

Yezid García

Leave a comment

Please login to leave a comment.