Un corazón ejercitado

¿Qué quiere decir este versículo?

Aunque por lo regular te preocupas de cómo luces exteriormente, lo que más le importa a Dios, no es tu apariencia externa, sino cómo luce tu corazón.

Hoy tienes la oportunidad no solo de cuidar tu cuerpo, sino de ejercitar tu alma. Así como el ejercicio regular tonifica tus músculos, y hace posible que experimentes una mayor salud física; así hay una manera como puedes tonificar tu alma y prepararla para que responda a los desafíos que tienes que afrontar en tu vida diaria:

«Es verdad que el ejercicio físico ayuda a que todo el cuerpo esté sano, pero es mucho mejor esforzarse por confiar cada vez más en Dios, porque nos hace bien aquí en la tierra y también nos servirá cuando vivamos en el cielo. Esto es una verdad que podemos creer, y debemos creer.»
1 Timoteo 4:8-9(TLA)
Puedes cultivar un cuerpo sano y una confianza cada vez mayor en Dios, o puedes cultivar un cuerpo sano y no preocuparte del estado de tu corazón.

Los pensamientos, las actitudes (motivaciones) y comportamientos que se tienen a la hora de obrar, van a determinar a mediano y largo plazo, lo que suceda con todo tu ser.

Jesús resaltó la importancia de tener un corazón libre de todo lo que contamina al hombre; y sólo Él por su obra redentora y a través de su Santo Espíritu, puede purificar tu corazón de todo lo que lo contamina.

Punto de acción

«Crea en mí oh Dios un corazón limpio y renueva un espíritu recto dentro de mí»
Salmos 51:10(RVR60)