Mujer!

Hablar de la Mujer es hablar de un ser especial, no porque sea una “súper mujer” sino porque fue el diseño que Su Creador le otorgó.

Ella es maravillosa y responde a una observación que el Señor hizo:

«no es bueno que el hombre esté solo» Gén. 2:18

Por ello la mujer vino a completar y suplir áreas donde este no es fuerte. En vez de concentrarnos en una pugna de superioridad con el género masculino, la mujer abrazando su hermoso y acertado diseño, debe buscar ser ayuda, en tanto que esa es su esencia. Juntos, hombre y mujer, construyen mejores familias, sociedad, iglesia y país.

En la conmemoración del Día de la Mujer no debemos olvidar este hecho en tanto que la misma historia da cuenta de cómo el género femenino hace honor a su diseño, aunque muchas veces las circunstancias no le sean favorables, como ocurrió aquel 25 de marzo de 1911. En aquella ocasión muchas mujeres murieron en hechos muy dolorosos.

Por ello hoy, más que nunca, nosotras debemos recordar su sacrificio y valorar la labor y los logros que en su momento mujeres valientes consiguieron, de los cuales hacemos uso, como el derecho al voto, el acceso a estudios universitarios y el mejoramiento de las condiciones salariales para las mujeres.

Aunque el panorama social, político, familiar y laboral ha cambiado para la mujer actualmente, este sigue siendo un reto para cada una. Para muchas de las integrantes del género femenino le es difícil lidiar con todas las responsabilidades que sobre ellas recaen, y sobre todo lo que se espera que ella aporte.

He estado en contacto con muchas mujeres y es fascinante escucharlas hablar de sus sueños, habilidades, logros, aun con dificultades y luchas, pero advierto un común denominador en la mayoría y es la tenacidad y la vehemencia con la que enfrentan la vida.

Parte de esta tenacidad viene de tratar de dar la talla a una sociedad que exige, que le dice a la mujer es ahora o nunca, es el tiempo de retomar las riendas de tu vida mujer. O lamentablemente, viene de un pasado vergonzoso, que le impele a sobreponerse a sí misma y avanzar. Pero allí yace un problema, es que hay mujeres que intentan hacerlo, pero sin haber sanado su dolor, su ira, su resentimiento, y en realidad no avanzan.

Entonces ese empoderamiento es desde una falsa seguridad que tiene su fundamento en sus metas alcanzadas, poder adquisitivo, títulos académicos, y fuerza interior. Hoy en día muchas mujeres salen adelante en detrimento de su bienestar espiritual, físico y emocional.

Def empoderamiento: desarrollar en una persona la confianza y la seguridad en sí misma, en sus capacidades, en su potencial y en la importancia de sus acciones y decisiones para afectar su vida positivamente (y aún su entorno).
Personalmente creo que quien empodera, quien equipa a una mujer es Dios mismo. (Porque es quien la creó y la conoce)

Y no es cuestión de una tarea por realizar o un propósito que cumplir, es fruto de un acto de amor que fue efectuado en la Cruz por Cristo Jesús.

Como resultado de no reconocer su diseño femenino y tampoco a su Creador, la mujer vive en constante angustia.

Punto de acción

• ¿Alguna vez has sentido angustia?
• ¿Alguna vez has sentido tu alma estrujada por la inclemencia de la droga sobre la vida de tu hijo o cónyuge?
• ¿Has llorado en la intimidad de tu cuarto al notar que tu salud está deteriorándose?
• ¿Has tenido días de desesperación porque tu matrimonio está quebrantado y no sabes qué hacer?

El llamado para ti mujer es: «Vuelve ahora en amistad con Dios, y tendrás paz; Y por ello te vendrá bien. Toma ahora la ley de su boca, Y pon sus palabras en tu corazón. Si te volvieres al Omnipotente, serás edificado; Alejarás de tu tienda la aflicción»
Job 22:21-23