Skip to main content
Ene28

En Su presencia

Mes // Enero

En Su presencia
« Dios le contestó: —Yo mismo voy a acompañarte y te haré estar tranquilo. Moisés le dijo: —Si no vas a acompañarnos, no nos pidas que salgamos de aquí.»
► Éxodo 33:14-15(TLA)

La vida de Moisés estuvo enmarcada por 3 periodos de cuarenta años; en los primeros cuarenta en el palacio de Egipto, Moisés se creía ‘alguien’; en los segundos cuarenta en el desierto, se creía ‘nadie’; en los terceros cuarenta, cuando Dios lo llamó, supo que Dios hace de un ‘nadie’, un ‘alguien’. Desde entonces supo que lo más importante de su vida era la presencia de Dios. Él sí sabía sobre la necesidad de ella.

El pueblo de Israel tenía una sensible inclinación de cambiar a Dios por otros dioses. Ellos tomaron la decisión de buscar otro dios, un “becerro de oro”, para que les condujera a la tierra prometida. Esto produjo la decisión de Dios de negarles Su presencia en la continuidad del viaje, y en cambio les daría un ángel para llevarlos a la tierra prometida.

Pero la determinación de Dios no hizo esperar a la de Moisés, el cual le dijo: «Si tu presencia no ha de ir conmigo, no nos saques de este lugar» v. 15. Esta petición muestra que Moisés valoraba más la presencia de Dios, que los ríos de miel y leche de la tierra prometida.

¿Por qué Moisés valoraba tanto la presencia de Dios?:

1. Sabía que no es lo mismo la guía de un ángel, o de cualquier criatura, que la guía de Dios. (V.2)
  • - Los ángeles no pueden perdonar pecados, Dios sí; y Moisés sabía que Israel era “de dura cerviz”.
  • - Los ángeles no conocen la mente y el corazón; Dios sí; Moisés sabía que Dios era el único capacitado para darles consuelo y paz.
  • - Los ángeles no responden nuestras oraciones, Dios sí; Moisés sabía que las respuestas a sus demandas siempre llegarían a los oídos de Dios.
2. Sabía que no es lo mismo adorar con un corazón frío, que con un corazón ferviente. (V.10)
  • - El estar consciente de tal presencia tiene que movernos hacia una auténtica adoración. Admitamos que muchas veces hay tanta frialdad en nuestras vidas que nos olvidamos rendirnos en adoración a Dios.
  • - Su presencia produce adoradores en Espíritu y en Verdad.
Oremos:

Tenemos que buscar la presencia de Dios en nuestra vida en todo momento. Tenemos que dejar de fijar nuestra vista en lo terrenal y buscar lo espiritual. Tenemos que dejar de ser creyentes de relación a medias con nuestro Padre, y pasar a ser fieles creyentes que dependemos de la presencia de Dios en nuestra vida.

¿De qué nos sirve hacer planes y hasta tomar decisiones, si no valoramos la presencia del Señor?

Lectura bíblica necesaria: Éxodo 33:12-23(TLA)