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Mayo05

¡Sana tus heridas!

Mes // Mayo

¡Sana tus heridas!
«El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; y el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo; porque de la abundancia del corazón habla la boca.»
► Lucas 6:45 (RVR60)

Cuando en la biblia se habla del corazón, no se refiere al músculo situado en la cavidad torácica que bombea la sangre a todo el cuerpo. El corazón, en el original hebreo y para Dios es el asiento de las actitudes, emociones y de la inteligencia.

Por tal motivo el corazón del hombre está expuesto a las experiencias, a las vivencias personales que siendo buenas o malas, dejan una huella.

Si el recuerdo o marca es bueno, dice la biblia: «del buen tesoro de su corazón el hombre saca lo bueno» Lucas 6,45. Pero si la experiencia ha dejado un dolor, una herida y es algo de lo que llamamos malo: «del mal tesoro de su corazón saca lo malo» Lucas 6,45. Porque siendo el corazón el asiento de todo lo que el hombre es, se convierte en el lugar de donde sale lo bueno o lo malo y especialmente por su lenguaje lo expresa, «porque de la abundancia del corazón habla la boca» Lucas 6,45.

No es necesario quedarnos allí, hay solución para las heridas del corazón:

«El sana a los quebrantados de corazón, Y venda sus heridas».
Salmo 147:3 (RVR60)

Dios mismo que creó el corazón del hombre, y lo hizo con esas especificaciones, también se ofrece como solución a las necesidades de los hombres, y hoy puede ser el día de tu sanidad.

Punto de acción

  • - Busca a Dios de todo corazón, Él te conoce, solo espera oír, conocer tu deseo de ser sanado.
  • - Cuéntale a Dios las heridas de tu corazón (abandono, soledad, culpa, amargura, odio, resentimiento, venganza, vergüenza, incredulidad), quizá cada una de ellos ha hecho parte de tu vida desde muy temprana edad y Jesús quiere recorrer esos momentos de tu vida contigo para poder sanarte. No lo calles, háblalo de todo tu corazón.
  • - Reconoce la aceptación, el perdón de Dios por tus pecados. ¡Él sana!
  • - Recibe a Dios como tu padre celestial a través de la obra de Jesús en la cruz del calvario para perdonar todos tus pecados y darte vida y vida en abundancia.
La vida en abundancia se disfruta cuando el corazón es sanado, liberado y perdonado.

«Envió su palabra, y los sanó, Y los libró de su ruina»
Salmo 107:20

Lectura bíblica necesaria: Lucas 6:43-45(RVR60)