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Feb09
Ángeles
► Hebreos 13:1-2 (NVI)
En ciertos momentos de nuestro andar, Dios nos presenta personas, que en un principio y desde nuestras perspectivas son simplemente seres del común o como a primera vista pensamos “un ser humano más“ con las que estamos acostumbrados a ver o a tratar a diario.
¿Sabes por qué Dios permite que eso suceda?
Quizás te suene algo loco, pero la respuesta es tan sencilla. Es solo para que nos demos cuenta que Él siempre nos rodea de sus ángeles, los cuales utiliza como personas, para decirnos que no estamos solos que tenemos su ayuda y que contamos con ellos, sea cual sea el momento.
Por otro lado, con el pasar del tiempo llegamos a sentir un cariño especial por dichas personas, pues el Espíritu Santo, obra de tal manera que nos hace entender que son seres únicos, y que debemos estar prestos a agradecer al Señor, por tan majestuoso regalo, que sin pedir a diario nos los brinda, aun en nuestro olvido, Él siempre está atento a todas aquellas necesidades y situaciones que vivimos en el día a día.
Punto acción:
Sé amable con quien se cruce en tu camino, ayudale, agradece al Señor por brindarte la oportunidad de conocerlo, pues nunca sabes si es uno de los tantos seres que Dios envio para proteger tu vida.
Lectura bíblica necesaria: Hebreos 13 (NVI) ¿Sabes por qué Dios permite que eso suceda?
Quizás te suene algo loco, pero la respuesta es tan sencilla. Es solo para que nos demos cuenta que Él siempre nos rodea de sus ángeles, los cuales utiliza como personas, para decirnos que no estamos solos que tenemos su ayuda y que contamos con ellos, sea cual sea el momento.
Por otro lado, con el pasar del tiempo llegamos a sentir un cariño especial por dichas personas, pues el Espíritu Santo, obra de tal manera que nos hace entender que son seres únicos, y que debemos estar prestos a agradecer al Señor, por tan majestuoso regalo, que sin pedir a diario nos los brinda, aun en nuestro olvido, Él siempre está atento a todas aquellas necesidades y situaciones que vivimos en el día a día.
Punto acción:
Sé amable con quien se cruce en tu camino, ayudale, agradece al Señor por brindarte la oportunidad de conocerlo, pues nunca sabes si es uno de los tantos seres que Dios envio para proteger tu vida.