¿Qué hay detrás del perdón?

Indudablemente todos los seres humanos tenemos una necesidad implícita en nuestros corazones y es la necesidad de trascender, de avanzar, de seguir adelante independientemente de las vicisitudes que a menudo enfrentamos. La trascendencia mira más allá de lo perceptible, más allá de lo común, mira más allá de las posibilidades y va más allá de una buena intención.

Dios Padre nos modelo lo que significa trascender más allá de los pronósticos a través del perdón, el primero amo, justifico y perdono, lo hizo a través de su amado hijo Jesús

El perdón de los pecados no es un tema incidental en el evangelio de Cristo. La esencia de este mensaje es que Dios ofrece a los pecadores de pura gracia el perdón de todos sus pecados por medio de la fe en nuestro Señor Jesucristo en base a Su vida perfecta, Su muerte expiatoria y Su resurrección.

El evangelio es un mensaje de perdón y reconciliación. Cualquier distorsión en ese aspecto del mensaje corrompe el corazón del evangelio. Dios nos perdonó, nos justificó atreves de Jesús y nos demanda que amemos y perdonemos de la misma manera en que el lo hizo con nosotros.

El perdón es la base de una vida de trascendencia

«Soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros. Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto.» Colosenses 3:13-14

El apóstol Pablo en este texto nos lleva a entender primero el tiempo pasado: “Como Cristo los perdonó”, y después en presente: “así también háganlo ustedes”. Esta frase da por sentado que tendremos que echar mano del perdón de Cristo en nosotros para poder perdonar a otros.

Muchas veces no queremos perdonar porque sentimos que la persona no lo merece. Pero, ¿cuándo ha sido el perdón algo que extendemos en base a eso? ¡El perdón nunca se merece! Por eso se llama perdón, y no “ponerse de acuerdo”. La necesidad de perdón siempre incluye el dolor, la aflicción, la angustia, el daño, y hasta el deseo de rechazar y querer venganza contra el ofensor. Sin embargo, como cristianos tenemos un lugar a donde traer estos sentimientos: la cruz del calvario

Por último, no podemos olvidar que el perdón de Dios no tiene nada que ver con algo que yo haya hecho, sino con lo que Jesús ha hecho, esto me lleva a pensar que si yo recibo su perdón gratis tengo que darlo a los demás gratis.

El autor de las crónicas de Narnia C.S Lewis decía que, para todos, el perdón es fácil hasta que nos toca perdonar

Efesios 4:32 nos enseña lo siguiente: «Sean más bien amables unos con otros, misericordiosos, perdonándose unos a otros, así como también Dios los perdonó en Cristo”.»